Ataúdes ecológicos, urnas biodegradables o espacios para esparcir o inhumar las cenizas de manera controlada entre los más solicitados
La incineración logra una cuota del 35% de los servicios funerarios en la provincia de Barcelona y en Catalunya se sitúa en el 25%
Jueves, 30 de octubre de 2008.- En el área metropolitana de Barcelona, cerca de un 40% de los servicios funerarios realizados durante el año 2008 han sido incineraciones, según Serveis Funeraris Integrals (SFI), empresa líder en la provincia de Barcelona en la gestión de tanatorios, servicios funerarios y cementerios. Este dato supone un aumento de casi un 30% respecto 2007, que confirma una tendencia creciente en los últimos años. Asimismo, este último año se ha observado un aumento del 21% en la solicitud de servicios funerarios sostenibles con el medio ambiente.
Joan Ventura, director de Cementerios de SFI, comenta que en un momento tan importante como es la defunción, cada vez más personas ejercen un compromiso con el medio ambiente. Muchos consideran que la defunción supone el regreso a la esencia de la naturaleza y por esto también prefieren escoger la manera más ecológica de hacerlo. También se ha detectado un crecimiento importante en el número de personas de Barcelona que solicitan enterrar familiares en el Cementerio Comarcal de Roques Blanques por el hecho de encontrarse en el entorno natural del Parque de Collserola y, a la vez, por la proximidad con la capital catalana.
SFI apuesta por opciones ecológicas en los servicios de sepultura que ofrece:
- Ataúdes ecológicos: han de estar hechos de madera con certificado de tala controlada, sin bisagras de metal ni vidrios, barnizadas al agua y forradas sólo con fibras naturales como el algodón o el lino.
- Urnas biodegradables, especialmente pensadas para las personas que quieren que las cenizas sean desperdigadas o inhumadas en un entorno natural. Actualmente, existen urnas de sal marina, de arcilla o arena sin cobre y de fibras vegetales compactadas.
- Espacios para depositar las cenizas de forma controlada en el cementerio Parc Roques Blanques:
El Jardí del Repòs es un espacio ecológico de estilo zen diseñado para desperdigar directamente las cenizas sobre un camino de piedras de río que se diluyen en un pequeño estanco subterráneo. En las paredes del Jardín se puede grabar el nombre de la persona difunta como memorial.
La Font del Repòs, ubicada en en el mismo Jardín, permite otra alternativa para depositar la urna -biodegradable- con las cenizas de la persona difunta en un monolito de pizarra. Tras la puesta en marcha de un mecanismo de agua caliente a 40º, la urna se deshace en unos 10 minutos y las cenizas se diluyen en un estanco bajo el conjunto.
El Bosque de la Calma. Roques Balnaques acoge este bosque, situado en una zona a los pies de la montaña dónde es posible enterrar una urna biodegradable y plantar un árbol joven encima. Desde que hace casi dos años que se inició este proyecto, único en España, el Bosc de la Calma cuenta ya con 250 ejemplares plantados. El árbol más solicitado es la encina (60%), por delante del pino piñonero (24%) y el alcornoque (16%), especies típicas de la cornisa mediterránea.
Ante la buena acogida de la iniciativa, SFI ha ampliado para Todos los Santos el servicio del Bosc de la Calma con los Árboles Familiares, más grandes, que permiten enterrar hasta cinco urnas de la misma familia alrededor.